Daniel Sabater flota sobre el escenario
Daniel Sabater presentó este sábado su primer EP, Tenemos que quedar, en Madrid. «Este es mi tercer concierto en mi vida y esto es una locura», confesó al inicio del show, «es la primera vez que toco en Madrid y tenía unas ganas increíbles, ahora quiero tocar todos los días». El murciano al fin pudo estrenarse en la capital gracias al ciclo Madrid Brillante -dentro de las fechas de Sábado Brillante-. Sabater aprovechó la gran cita, donde tocó diferentes instrumentos como el ukelele o el bajo y contó con la compañía de varios amigos en el escenario. Durante la hora y poco que duró el espectáculo transmitió la ilusión que tenía por estar allí, con pequeños trotes por todo el escenario, como si estuviese flotando en la Luna.
Además de los cinco temas que componen el EP, el artista cantó otras de las canciones que le han llevado hasta aquí, como No estás -con la que abrió el concierto- o Helado -su primer single-. Sabater anunció muy pronto la primera sorpresa de la tarde: «Voy a cantar una canción que nunca he cantado en directo, a ver si sale bien». Así, Flavio apareció para interpretar Ya. «Me he traído a muchos más invitados, ¿a quién queréis?», bromeó, «voy a invitar a otra persona al escenario». One Path fue el segundo en cantar, esta vez Tenemos que quedar, sencillo del que es productor. También aprovecharon para tocar Guinda, una canción del propio invitado.
«A la hora de diseñar la setlist, como no tengo mucha experiencia en esto, hemos metido todas las colaboraciones juntas», rio el murciano. Con ello, subieron al escenario Chechu -para cantar una versión acústica de Cute-, Roy Borland -con quien «no había ensayado el tema juntos» y sonó un 2010 de escándalo-, Walls -para reventarlo con Talk y rematar con Partirme la cara– y, por último, Sebastián Cortés, uno de los más esperados. Con el madrileño cantó el remix de Calor y Cortés desveló el futuro que les une: «Este año vamos a sacar un EP juntos». Los gritos y los aplausos inundaron el teatro. El dúo presentó la demo de una de las canciones, un tema pop titulado Americanadas.
El fin del espectáculo se acercaba. Después del bis, llegó el momento más gracioso de la tarde. Sabater cogió un bajo para interpretar El sofá, pero repitió la canción por completo porque no se escuchó el instrumento en ningún momento. «Es normal que haya problemas, es mi tercer bolo», justificó sin perder la sonrisa. También le dedicó Cómo quieres que me enfade a su novia, que estaba entre el público, y cerró con Este año era el bueno. Aunque no haya sido el mejor año para la gente en general, seguro que Daniel Sabater lo recordará con mucho cariño.